Icono del sitio Gamelearn: Game-based learning courses for soft skills training

¿Cómo aprender mejor? Jugando

cómo aprender mejor: jugando

Todos queremos mejorar. Todos necesitamos crecer. ¿Cómo optimizar el aprendizaje? ¿Cómo aprender mejor? La mejor forma es hacerlo mediante el juego. Sigue leyendo y averigua el por qué.

Herramientas de evaluación

Las ventajas del juego online son muchas y variadas. La más seductora para los responsables de formación es la capacidad de evaluar que ofrecen los nuevos métodos gamificados. Cuando un alumno utiliza una herramienta online para aprender conocimientos o desarrollar una habilidad, el ordenador registra una gran cantidad de información. Las acciones de los participantes son grabadas paso a paso, de tal manera que la evaluación posterior es sencilla y valiosa. Sencilla, porque el registro de datos es automático; y valiosa, porque ofrece información fiable e imposible de obtener con otros métodos.

Sistema de puntuación

Además de la posibilidad de medir el avance de los participantes, el game-based learning de calidad ofrece un sistema de puntuación que permite la autoevaluación. El alumno mide su propio avance gracias a diversas opciones: niveles, puntos, clasificación, premios, etc. En algunos serious games el participante es consciente de su avance según se encuentre en una etapa virtual u otra, según tenga disponible unas opciones u otras, o simplemente según le indique su posición en el ranking.

Aprender a base de práctica

Jugando se aprende mejor por una buena razón: el juego proporciona la posibilidad de practicar. Cuanto más practicamos algo que queremos interiorizar, más fácil nos resulta aprender. Con los serious games y simuladores, la práctica se hace sin riesgo. En otras palabras: cometer errores no es el fin del mundo. El fallo está permitido porque posibilita el aprendizaje. Las personas que cometen errores aprenden a corregirlos, el game-based learning deja que el alumno explore y se equivoque para que termine por asimilar los contenidos de forma efectiva. Favorece la toma de decisiones. Confucio lo resumió muy bien: “Olvido lo que leo; recuerdo lo que veo; aprendo lo que hago”.

Es divertido

No todos los juegos sirven para aprender, pero casi todo se puede aprender jugando. Un idioma, una competencia necesaria para tu desarrollo profesional, una habilidad que te haga crecer personalmente, etc. El dominio de nuevas técnicas es un reto, pero no tiene por qué ser algo aburrido. Cuando el enfoque del aprendizaje está orientado a la diversión, el proceso puede ser muy agradable. Los juegos están lejos de los métodos repetitivos y tediosos, basados en la simple memorización de datos, lo que da lugar a un nulo progreso y a un aprendizaje muy pobre.

Es fácil y atractivo

Es posible aprender mejor gracias a los juegos, a los cuales se puede acceder desde ordenadores, aplicaciones para smartphones, tabletas, etc. En definitiva, mucho más accesible en el tiempo y en el espacio, para que el aprendizaje sea además de divertido, sencillo.

Es Interactivo

El ser humano es social y nuestra mente es un dispositivo diseñado para interactuar “en red”, conjuntamente con otras personas. Sólo mediante ciertos simuladores se pueden desarrollar habilidades sociales, soft skills, mucho más adecuadas y fáciles de asimilar en un contexto de juego que en uno más tradicional basado sobre todo en textos. Los juegos poseen estructuras que favorecen la implicaciónengagement– en parte gracias a la capacidad de hacer algo colectivamente y de su aspecto competitivo que refuerza el sentido de compromiso del usuario.

 

¿Aún no crees que se aprende mejor jugando?

Salir de la versión móvil